29 octubre 2007

Si no va, mal. Y si va, peor.


Zapatero acudió ayer domingo a Barcelona para conocer de primera mano el grave problema que supone tener prisas con las obras del AVE. Llegó y vio cómo a escasos metros se producía otro socavón. Acompañado del President Montilla se reunió con técnicos y Alcaldes afectados de la zona y asumió la responsabilidad total y absoluta para él y su gobierno de los desastres que están ocasionando a los barceloneses dichas obras. Rectificó como le pedían los ciudadanos: Primero la seguridad, segundo dar prioridad a los trenes de cercanías y en último lugar posponer los plazos para el AVE supeditándolo al cumplimiento de las dos primeras prioridades.

Viene Rajoy y se queja: Primero de "electoralismo" por parte del Presidente Zapatero y segundo de "haber ido en domingo y no en lunes" cuando el cáos es más evidente. Si hubiese ido en lunes, seguro que la crítica hubiese sido por no ir en martes y así. Con esta derecha no hay quien se aclare: Si no va, mal. Y si va, peor.

El caso es que el Presidente Zapatero ha asumido una responsabilidad que en principio no tenía, puesto que el trazado de la discordia es y era el mismo que el planificado inicialmente por el PP y sus entonces socios catalanes de CiU, pero que ha asumido porque es quien contrata y ejecuta las obras.

Mientras, la constructora OHL, responsable directa de los incidentes por no cumplir las recomendaciones de seguridad que el Ministerio de Fomento le hizo saber en su momento, sigue con la contrata y con la ayuda de dos nuevas empresas de apoyo y con la mirada vigilante del Ministerio de Fomento, cuya titular, Magdalena Alvarez, no dimite para seguir al pié del cañón como corresponde a quien se siente "responsable" y no huye ante la adversidad. Cuando se resuelva el problema, entonces se supone que es cuando asumirá su propia "responsabilidad" como Ministra.

Es una solución valiente y cuyo fin debe ser el inmediato restablecimiento de la normalidad en el tráfico de cercanías y , sobre todo, en los ciudadanos que se han visto perjudicados gravemente en sus interéses económicos y en su dignidad como personas. Ahora lo que se trata es de tomar las medidas apropiadas para que no hayan mas lesiones, ni en los trabajadores ni en los usuarios afectados. Y cuidar de reparar los daños ocasionados en las viviendas colindantes y que no vuelva a ocurrir de nuevo tamaño desastre.

Zapatero se juega mucho, pero mucho más se juegan los barceloneses.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Asperilla dijo... “Si yo tuviera un hijo militar no me serviría de consuelo que mi hijo muriera junto a la bandera de la ONU en vez de junto a la bandera de EEUU”. ¿Quieres decir que te serviría de consuelo el que tu hijo (si lo tuvieses), muriese junto a la bandera de EE.UU?; ¿sabes lo que has dicho?. Tu no tienes hijos, seguro. No obstante lo anterior, te diré que si alguno de mis hijos muriese defendiendo a mi patria (España), yo no encontraría consuelo, y mucho menos, si compruebo que mi gobierno ha contratado aviones ruinosos (Yak-42), se estrellen, mueran 63 soldados españoles y ese gobierno reparta partes de cuerpos que no se corresponden y además amenace a los familiares que protestan: eso lo hizo el gobierno de Aznar, y no ha pedido perdón....sigue...