Ahora resulta que cuando nieva la culpa es del gobierno de Zapatero. La titular de Fomento Magdalena Álvarez, por hablar, se come los marrones de la nieve y exigen su dimisión (los de siempre). Y la Sra. Aguirre, irresponsable presidenta de la Comunidad de Madrid, porque no admite responsabilidad ni siquiera de su propia gestión, se come los polvorones.
Cuando ningún servicio de meteorología acierta ni por aproximación (estos días decían que por Valencia iba a llover y nevar a troche y moche resultando sol radiante y frío, mucho frío) pues resulta que es ZAPATERO QUIEN TIENE LA CULPA. Eso les pasa por admitir responsabilidades.
Esperanza Aguirre ha dicho que en su comunidad todo ha ido bien salvo en las carreteras que no son de su competencia y aeropuerto de Barajas, gestionados por el gobierno central. Y la presidenta se queda tan pancha, eso sin mencionar a la cantidad de imbéciles que la aplauden sin rubor y vergüenza.
Desde que en España se instaló la política del absurdo, cuyo Cid campeador era y sigue siendo José María Aznar, lo que es normal en la vida diaria es elevado a la queja rotunda y la acusación obscena de todos los males habidos y por haber, incluido mi dolor de cabeza, con el dedo "digital" clavado en el ojo de Zapatero.
Seguramente con Rajoy en el gobierno esto no hubiese pasado, con ellos no cae nieve. Hubiese sido peor pero sus medios de comunicación le hubiesen echado la culpa al jefe de la oposición, en sus deseos íntimos, Zapatero. Es lo que hacen en la Comunidad Valenciana. Por desgracia hay demasiados tontos de los cojones que siguen chupándose el dedo de forma babeante.
Es lógico y normal que los afectados por la nevada madrileña, en España también ha nevado y mucho, estén cabreados por no ser avisados cuando salían de sus casas con sus vehículos motorizados; y que los pasajeros de altos vuelos estén hasta los mismísimos por lo que hay que aguantar en el aeropuerto de Barajas, SEPLA, AENA, IBERIA y mucho más. Pero de ahí a cargar el mochuelo al gobierno de Zapatero hay mucha distancia. Es cierto que hay que mejorar muchas cosas, quizás si los gobiernos del PP se hubiesen dedicado a mejorar los servicios en vez de privatizar en sus propias manos patrimonio y servicios, como la parte en cargos que les tocó de IBERIA, pues ahora no nos quejaríamos tanto.
Cara de tonto se le quedaría a Mariano Rajoy cuando se bajó de un avión en solidaridad con una periodista, cara de póker a la presidenta Aguirre quejándose de no haber podido coger el mismo avión que Pepe Blanco para ir a Valencia. Se olvidan de los calcetines blancos y del "gafe". ¡De buena se ha librado el sr. Blanco!.
Nunca me he explicado cómo con tanto mentiroso profesional instalado en los gobiernos del PP, por lo que hemos visto cuando han sido oposición, que haya gente tan ciega que no quiera ver lo que es claro hasta para un niño de cinco años. Seguramente tenemos muchos bebés, demasiados, aplaudiendo al son de sonajero.
POSTDATA: En Estados Unidos y en Europa también ha nevado, se han cerrado aeropuertos y carreteras pero no tienen a ningún Zapatero a quien echar las culpas. Aunque tengan mucha experiencia también se quedan bloqueados. Aquí parece que lo preferible es estrellarse, llegar a tiempo (al cielo) es mucho más importante que la seguridad. De eso sabe bastante el PP (Yak).
Cuando ningún servicio de meteorología acierta ni por aproximación (estos días decían que por Valencia iba a llover y nevar a troche y moche resultando sol radiante y frío, mucho frío) pues resulta que es ZAPATERO QUIEN TIENE LA CULPA. Eso les pasa por admitir responsabilidades.
Esperanza Aguirre ha dicho que en su comunidad todo ha ido bien salvo en las carreteras que no son de su competencia y aeropuerto de Barajas, gestionados por el gobierno central. Y la presidenta se queda tan pancha, eso sin mencionar a la cantidad de imbéciles que la aplauden sin rubor y vergüenza.
Desde que en España se instaló la política del absurdo, cuyo Cid campeador era y sigue siendo José María Aznar, lo que es normal en la vida diaria es elevado a la queja rotunda y la acusación obscena de todos los males habidos y por haber, incluido mi dolor de cabeza, con el dedo "digital" clavado en el ojo de Zapatero.
Seguramente con Rajoy en el gobierno esto no hubiese pasado, con ellos no cae nieve. Hubiese sido peor pero sus medios de comunicación le hubiesen echado la culpa al jefe de la oposición, en sus deseos íntimos, Zapatero. Es lo que hacen en la Comunidad Valenciana. Por desgracia hay demasiados tontos de los cojones que siguen chupándose el dedo de forma babeante.
Es lógico y normal que los afectados por la nevada madrileña, en España también ha nevado y mucho, estén cabreados por no ser avisados cuando salían de sus casas con sus vehículos motorizados; y que los pasajeros de altos vuelos estén hasta los mismísimos por lo que hay que aguantar en el aeropuerto de Barajas, SEPLA, AENA, IBERIA y mucho más. Pero de ahí a cargar el mochuelo al gobierno de Zapatero hay mucha distancia. Es cierto que hay que mejorar muchas cosas, quizás si los gobiernos del PP se hubiesen dedicado a mejorar los servicios en vez de privatizar en sus propias manos patrimonio y servicios, como la parte en cargos que les tocó de IBERIA, pues ahora no nos quejaríamos tanto.
Cara de tonto se le quedaría a Mariano Rajoy cuando se bajó de un avión en solidaridad con una periodista, cara de póker a la presidenta Aguirre quejándose de no haber podido coger el mismo avión que Pepe Blanco para ir a Valencia. Se olvidan de los calcetines blancos y del "gafe". ¡De buena se ha librado el sr. Blanco!.
Nunca me he explicado cómo con tanto mentiroso profesional instalado en los gobiernos del PP, por lo que hemos visto cuando han sido oposición, que haya gente tan ciega que no quiera ver lo que es claro hasta para un niño de cinco años. Seguramente tenemos muchos bebés, demasiados, aplaudiendo al son de sonajero.
POSTDATA: En Estados Unidos y en Europa también ha nevado, se han cerrado aeropuertos y carreteras pero no tienen a ningún Zapatero a quien echar las culpas. Aunque tengan mucha experiencia también se quedan bloqueados. Aquí parece que lo preferible es estrellarse, llegar a tiempo (al cielo) es mucho más importante que la seguridad. De eso sabe bastante el PP (Yak).
1 comentarios:
Ya ve usted. Nunca nieva a gusto de todos. No hay seriedad y profesionalidad en la política española.
Un saludo.
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