ESTADOS UNIDOS EN QUIEBRA TOTAL

Joe Biden, vicepresidente electo de los Estados Unidos avisa a navegantes que la crisis "es mucho peor" de lo que se pensaba y que la quiebra de la economía americana puede ser completa y total. Es un mal aviso para todos, europeos y japoneses sobre todo. Si la locomotora mundial se estrella, los vagones,que somos todos los demás, nos iremos al cuerno.

Barack Obama dio un aviso recientemente a las empresas de automoción sobre el alcance de las ayudas que se estaban concediendo al sector, podría ser que se enterrasen millones de dolares junto con alguna multinacional, y no estaba dispuesto a ello. En este caso el segundo de a bordo ha sido mucho más explícito y se va a una inversión a corto plazo de más de 600.000 millones de dolares para invertir en infraestructura, tecnología y fuentes de energía alternativa sólo para mantener en sus puestos de trabajo a dos millones y medio de trabajadores. Todo ello sin saber cuál va a ser el resultado y esperando que la crisis vaya a necesitar muchos más años de lo que en principio se esperaba para recuperarse por completo.

En lo que respecta a Europa, en Japón parece que ya están casi por los suelos, los gobiernos van a tener que emplear mucha paciencia y mucho sentido común, peleas incluidas porque las va haber, para ponerse de acuerdo en sus políticas e invertir a lo Keynes con mucha más energía de lo que lo están haciendo ahora. España, su gobierno, diseña en papel políticas similares a como lo hacen en Estados Unidos, con Obama. El ruido de fondo, el que ejerce la prensa y la oposición, no ayuda en nada a las políticas que tanto Obama en su país como Zapatero en España parece que quieren llevar a cabo. Sea como sea nadie asegura una reelección a Zapatero, no se hizo con Felipe González cuando se iba saliendo de una crisis mucho menos peligrosa, pero el problema pasará presumiblemente al Partido Popular (de Rajoy o de Rato, da lo mismo) y los ciudadanos habremos sido castigados innecesariamente por un enfrentamiento absurdo. No es lo mismo en los Estados Unidos en el que republicanos y demócratas apechugan juntos para salvar lo que parece insalvable.

A veces el optimismo necesario te lo tiran por los suelos en menos de un abrir y cerrar de ojos. Y aunque aquí parece que la crisis es de ficción (los centros comerciales , bares y restaurantes han estado funcionado estos días con lleno total y sin freno en el gasto) las cosas no deben estar muy claras. A nivel de calle la opinión esta muy dividida, para unos la hay y para otros es un bluff, solo en los medios de comunicación y en los políticos parece que el mundo desaparece bajo nuestro pies. Es una situación que queremos pensar que es irreal y algo esta fallando.

Por si acaso nuestros políticos y sobre todo nuestros gobernantes, deben ponerse a trabajar muy en serio. Unas elecciones se pueden volver a ganar, pero un país que se hunde sin saberlo es mucho más desastroso de lo que a simple vista pudiese parecer. Es preciso un pacto de Estado por lo que pudiera pasar y , sin embargo, los temores de que nuestros políticos no estén a la altura, me refiero más concretamente a la oposición que debe gobernar en un futuro, es mucho más cierto que otra cosa.

Si fuésemos más críticos con nosotros mismos, como personas no como partidarios de este u otro partido o facción ideológica, sabríamos elegir mucho mejor a nuestros dirigentes. Pero ahora no es el momento de los héroes patrioteros de pandereta, y sin embargo es cuando más abundan, sino de los conductores, de los gestores y de los líderes con cabeza.

Cuando pasen las fiestas navideñas, quizás por eso tiramos la casa por la ventana, nos encontraremos con otro panorama al meternos las manos a los bolsillos. La confianza y el optimismo responsable van a ser muy necesarios, también las acciones políticas firmes, duras e impopulares.

Espero y deseo que nuestros guias políticos dejen de tirarse los trastos a la cabeza, lo que indicaría que son capaces y dignos de recibir nuestra confianza y se pongan juntos a trabajar. Por si las moscas.