IDEAS PARA EL PSPV-PSOE 3

Si se pregunta a cualquier joven valenciano lo más seguro es que crean que el Metro de Valencia, el Palau de la Música o la Ciudad de las Artes y de las Ciencias ha estado "toda la vida" o ha sido obra de Rita Barberá, Camps o Zaplana, sin asociarlos mínimamente a los socialistas del PSPV-PSOE, Joan Lerma o Ricard Pérez Casado. Siempre asocian al PSPV-PSOE con lo negativo, al paro o que es delegación de Madrid y , en todo caso, se les tiene como ajenos a la vida valenciana

Una de las principales labores en las que se debe embarcar el socialismo valenciano es refrescar la memoria colectiva de los valencianos. Es prioritario desempolvar de hemerotecas y videotecas el archivo histórico de los logros conseguidos en la Generalitat Valenciana, Diputaciones y Ayuntamientos, cuando los socialistas gobernaban. Máxime cuando los actuales gobernantes en la Comunidad se han dedicado a utilizar todos los medios a su alcance para programar el "borrado masivo" de todo aquello que huela a socialista durante quince años y a apropiarse de todo lo conseguido entonces.

Sorprende saber que la juventud valenciana concibe al PSPV-PSOE como un partido de criticones, carcas y faltos de ideas, cuando las actuales carreteras y autopistas valencianas, el Metro de Valencia, Canal 9, polideportivos, casas de la cultura, ambulatorios y muchos colegios e institutos no se conocían, ni siquiera los chiringuitos nocturnos de playa, hasta la llegada de los socialistas a la Generalitat Valenciana, diputaciones provinciales y ayuntamientos. Mientras que el PP desde el principio se limitó a dar una mano de pintura y gastar un generoso presupuesto, que entonces no lo había, en tracas, petardos y grandes eventos.

Todo lo que hay de nuevo y tangible en la Comunidad Valenciana no se puede concebir sin la actuación de los socialistas que precedieron a los actuales. Los socialistas de hoy deben reivindicarlo como propio y no dejar, como se ha hecho hasta la fecha, que sean los del PP los que se hagan dueños de un edificio en el que ni siquiera han puesto los muebles. De hecho no sólo se han hecho los dueños sino que se permiten el lujo de tratar a los socialistas como forasteros en su propia tierra. Sorprende que un murciano como Zaplana, una alcaldesa de Valencia como Rita Barberá que desprecia el valenciano como lengua de uso diaro y un President como "tio Paco" que procede de un pueblo donde el castellano siempre ha sido lo moderno, sean los representantes y símbolo de valenciania y se vanaglorien de ello tras buenos "cubatas" antes de salir al escenario.

Algunos cargos del PP me confesaban que su máxima es que "se hable del PP, sea bueno o sea malo lo importante es que el PP suene". Porque lo que importa es que las siglas PP eclipsen a las siglas del PSPV-PSOE en la mente del colectivo valenciano, al final todo lo bueno y lo malo siempre lo hace el PP, el PSPV-PSOE no existe. Ya se sabe que la gente se conforma con lo que hay ante la inexistencia de alternativa.

Ya deberían estar trabajando en el PSPV-PSOE de Jorge Alarte, ahora que se va a dedicar de lleno a la Secretaría General, en recopilar datos para sus propios militantes, que también padecen de "amnesia", para refrescar la memoria del colectivo valenciano antes de proceder a ofrecer alternativas que puedan copiar los del PP, que siempre lo hacen. El siguiente paso, una vez asociado lo positivo que ha sido el PSPV-PSOE para los valencianos, será ofrecer una alternativa fresca de futuro tecnológico, ecológico y enraizado en la laboriosidad del emprendedor valenciano.

Que no todo el "pan y circo" es del PP. El pan lo puso el PSOE en su día creando el chiringuito donde el PP celebra la fiesta y el jolgorio. Y eso se deber recordar.