24 julio 2008

LOS SOCIALISTAS SON ATEOS

El Arzobispo emérito de Pamplona, Fernando Sebastián, ese que dijo que "los cristianos deben votar a Falange Española de las JONS", dice que "todas las filosofías ateístas terminan siendo dictatoriales" y que "los socialistas son ateos". Un silogismo que conduce a deducir que los socialistas son dictadores. Se supone que las filosofías idealístas, las que defienden todas las religiones como organizaciones de poder, nacen, crecen , se reproducen y terminan.... de forma democrática.

Lo dice alguien, Fernando Sebastián, que, en consonancia con la cuadrilla de la Conferencia Episcopal Española, ha sido elegido "democráticamente" por el dedo de un Papa, que a este a su vez lo eligen otros, elegidos también digitalmente por otro Papa. Lo dice alguien cuyo mérito es pertenecer a una secta cuyo fín primero y último es la posesión y mantenimiento del poder de la influencia por los siglos de los siglos ,y mantener a raya a todos los que se opongan o ignoren ese su poder, manipulando las creencias que todos los seres humanos desean tener, por el hecho de ser humanos, sean creyentes o ateos, para no tener que sufrir sólos ante la muerte o lo desconocido.

Tiene gracia que un representante de una organización basada en la muerte (el crucifijo) y el miedo (la Biblia) sea quien hable de filosofía, que no es otra cosa que la búsqueda de la verdad. Y ellos, los iluminados con sotana, la buscan en "la inspiración divina" de sus trasnochadas alucinaciones e imaginaciones o las de alguien que por encima de ellos pueda hablar con Dios en estado de trance.( Dios es el motor de la creación que "siempre" ha estado, el Universo no ha estado "siempre". En todo caso se aplica el artículo primero por el cual el Universo es lo que llamamos Dios y por lo tanto es una "persona con mucho poder que me dice a mí, y sólo a mí que soy tu sacerdote, lo que tú tienes que hacer ) .

Estos cuervos que con sus graznidos han amasado poder y fortuna a lo largo de la historia, a costa de forzar el conocimento sesgado de un pensamiento único y excluyente por medio del fuego y el horror, se permiten hablar de "laicidad" cuando son los primeros en pasarse por la entrepierna toda su doctrina que imponen por la fuerza. Y temen que la costumbre de la ignorancia se torne en costumbre de conocimiento y así dejar de ser necesarios, para interpretar a su gusto lo que nuestros sentidos y razonamientos nos dicen.

Y llevan siglos anunciando la "Buena Nueva" a base de asesinatos y castrando al personal en nombre de Cristo. Es la Iglesia de lo "nuevo" y eso que sus seguidores alargan su vida no gracias a su creencia "ingenua" en la ciencia a la que combaten, y que es la que les permite vivir más años, sino en la fe salvadora de los propios miedos que ellos mismos meten a la gente. (Fe es creer en algo que no se ve ni se toca pero que se espera que algún día, más en la "otra vida" que en esta, se cumpla. Se transmite a través de la educación para justificar lo que no tiene justificación alguna y amenazar de esta forma, con cualquier agravio presente o futuro, para que nadie se rebele porque lo dice Dios, es decir , porque les sale a ellos de los santísimos...,).

Podríamos hablar de la vida que tanto dicen defender, a la que machacan con la negación de todo lo que es vital para la vida misma, exterminando culturas para imponer la suya propia, asesinando a millones de inocentes que aunque no hayan sido fetos entonces, sí eran seres humanos y creciditos después. De la moral que practican metiendo mano a los niños por debajo de sus ropas y pidiendo perdón sin dejar de meter mano. Del negocio de los matrimonios, de la Santa Rota y de la igualdad de la mujer para ejercer el ministerio sacerdotal. Del desvío de herencias de ingenuos creyentes, de la censura no sólo de sus fieles sino también a los que no lo són. En fin, podríamos hablar de muchas más cosas que resumen lo que es esta secta religiosa de manipulación, miedo, odio, rencor e ignorancia.

Es aberrante, trasnochado y anacrónico que tengamos que mantener la holgazanería de estas garrapatas con nuestros impuestos y encima tener que soportar sus "consejitos". ¡ Ojalá los socialistas fuesen ateos !.

Los socialistas son demasiado diplomáticos con esos parásitos de la naturaleza y encima les untan de pasta. Es el miedo justificado a cómo se las gastan estas criaturas divinas, es comprensible. Pero los demás no tenemos porqué aguantarlos con nuestros esfuerzos y con nuestro dinero, quien quiera verlos que vaya al circo (romano) o a las iglesias, que, por cierto, pertenecen a todos los españoles que las han pagado a través de los siglos con su sangre..

0 comentarios: